Back to basics

Tenía horas frente a esa hoja en blanco viendo sus ideas pasar 

(¿En verdad las dejaste pasar o se estacionaron en ti?) 
Era la tercera taza de té chai que, aunque fría bebía por reflejo 
Lo único que lograba eran apenas un par de garabatos sin sentido 
Sus ojos comenzaron a nublarse, las emociones se desvistieron y 
las letras empezaron a tomar fotografías de su desnudo para 
plasmarlos en el lienzo blanco admirado por horas...
...Inició a escribir con toda velocidad, sin preocuparse, sin poses, 
la intensidad de ese momento, el chai, la lluvia y la memoria 
pintaban sin pudor alguno cada sensación, cada emoción, así, sin mas. 
Ella no sabía si ese caos en perfecto orden la llevaría a algún lado
pero sabía que ya no podía detenerse, no paraba de llorar ni de escribir,
las palabras fluían cada vez más y más rápido hasta ya no poder mas...
...Y lo que ella sintió al finalizar solamente puede compararse con esa explosión
de placer, que aparece frenética después de hacer el amor. Despertar.